KFC: récord de ventas gracias a su estrategia de marketing, así de simple.
Lo simple vende: La lección de KFC que Maybelline debería seguir
KFC acaba de dar un golpe maestro en marketing: logró un récord de ventas apostando por la simplicidad. ¿Su secreto? Nada de mensajes rebuscados ni campañas enredadas. La marca se enfocó en lo que mejor sabe hacer: pollo frito crujiente y delicioso, presentado con mensajes claros y directos. Sin adornos innecesarios, solo sabor y tradición. ¡Y funcionó!
Ahora, ¿qué tiene que ver esto con Maybelline? Mucho más de lo que crees. La marca de cosméticos podría aplicar esta fórmula ganadora simplificando su comunicación. Imagina campañas donde los productos hablen por sí solos: un rímel que realmente agranda las pestañas, un labial que dura todo el día, sin promesas exageradas ni tecnicismos.
A continuación, unos vídeos para explicarte un poco más:
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